Medio Ambiente: Cenicienta del gobierno y crisis institucional
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Escrito por: Paíno Abreu
El Día Mundial del Medio Ambiente debe ser todos los días, debido a que por su transversalidad abarca todos los ecosistemas, todas las especies y todos los lugares del planeta todo el tiempo.
No obstante, las naciones han escogido el día 5 de Junio como el Día Mundial del Medio Ambiente y como siempre, Fuerza del Pueblo aprovecha la ocasión para reflexionar sobre el tema.
Como se sabe, la extracción y uso inadecuado de los recursos naturales, especialmente de los combustibles fósiles, ha puesto en estado de crisis a todo el globo terráqueo. Por donde quiera que se mire a nivel internacional, sea la selva de la Amazonía, la barrera arrecifal de Australia, los ríos Mekong y Ganges, el avance de los desiertos de Gobi y el Sahara, o los acelerados cambios de clima que provocan olas de calor e intensas y frecuentes tormentas y sequías, nos enfrentamos a situaciones trascendentales que para muchas personas rayan en la supervivencia.
El impacto local de los problemas ambientales globales requiere de una gran capacidad de articulación de políticas públicas nacionales para su mitigación, adaptación y resiliencia, así como las habilidades necesarias para aprovechar adecuadamente la cooperación internacional disponible. Mientras eso ocurre, los más pobres y vulnerables cargan con la peor parte.
Si fijamos la mirada en nuestro país es fácil darse cuenta que la situación ambiental de la República Dominicana es cada vez peor. Cuesta encontrar un solo rio que no esté contaminado. Es así en el Camú, el Ozama, el Higuamo, el Yuna, el Yaque del Norte, el Artibonito y prácticamente todos sus afluentes.
Las montañas dominicanas solo están protegidas en papel. La Constitución, la Ley General Ambiental y otras leyes sectoriales, reglamentos y resoluciones, el Ministerio de Medio Ambiente, los ayuntamientos, el INAPA, la CAASD, y todo lo demás ha sido inútil para proteger y controlar nuestro patrimonio natural más preciado.
¿Cómo se puede explicar que aun sabiendo que los ríos dependen de la cobertura forestal de las cuencas altas, las instituciones responsables y sus funcionarios no son capaces de crear los mecanismos de participación y los incentivos necesarios para garantizar mayores niveles de conservación?
El problema ambiental se repite en las playas y zonas costeras dominadas por el plástico y residuos diversos, construcciones en zonas prohibidas que causan erosión y la descarga de aguas residuales no tratadas.
Igualmente, en las ciudades y zonas pobladas la recogida, el tratamiento y el depósito de los residuos sigue siendo un gran dolor de cabeza para los ciudadanos, lo mismo que la falta de redes pluviales y sanitarias y plantas de tratamiento para las aguas servidas.
Enfrenar estos temas fue una promesa del 2020 incumplida por el Presidente Abinader. Volvió a prometerlo en este año y esperamos que tenga éxito.
Sabemos que los problemas señalados no son únicamente responsabilidad del actual gobierno, pero si nos damos una vuelta por el Zoológico Nacional, el Acuario Nacional y por las casetas de vigilancia de las áreas protegidas o simplemente preguntamos a la gente común sobre su confianza en el trabajo del Ministerio de Ambiente, la respuesta será “CERO, se quemaron”.
Y es que no hay un solo indicador ambiental que haya mejorado en los últimos años. Es sabido que la participación social es crucial para cuidar el medio ambiente, pero sin un gobierno en capacitad de formular e implementar políticas ambientales claras y definidas, lo que veremos serán muchos selfies, reuniones, visitas, proyectos ambientales teóricos y pérdida masiva del patrimonio natural.
Lo dicho anteriormente junto a la ineptitud y la caída del liderazgo de las autoridades sectoriales han afectado seriamente nuestro medio ambiente y con ello el ecoturismo y el turismo cultural y si así continuamos terminará impactando negativamente el turismo de sol y playa, la agricultura y otras industrias, e igualmente la salud de la gente y de toda la biodiversidad.
En opinión de la Fuerza del Pueblo las políticas ambientales de la República Dominicana deben cambiar para mejor. Este Día Mundial del Medio Ambiente quisiéramos mirar hacia atrás y ser más positivos, pero si hace un año estábamos mal ahora estamos peor.
La gente en las calles recuerda el impacto positivo del Plan Nacional Quisqueya Verde pero no logra identificar nada de trascendencia ambiental que haya hecho este gobierno.